Memoria subversiva de los humillados

Escribe Salustiano Martín en Reseña
(Madrid, marzo de 1999):



"La marcha de 150.000.000: Memoria subversiva de los humillados" 
Enrique Falcon (Valencia, 1968) reside, y no es casualidad, en el Barrio del Cristo. Tampoco lo es que sea miembro del Voluntariado de Marginación «Claver» y de la Comunidad de Vida Cristiana «Ignacio Ellacuría». Tampoco, que haya formado parte del colectivo crítico «Alicia Bajo Cero», empeñado en desvelar las trampas ideológicas de cierta poesía actual, empantanada en un lodazal reaccionario y escapista. Enrique Falcón trata de no ser una persona escindida: lucha siempre por conseguir los mismos fines solidarios: en su trabajo en el barrio, en las organizaciones sociales en que está integrado, en la poesía que escribe. Uno siente verdadera emoción al ver que aún quedan quienes se toman la vida y la escritura como un trabajo de hermandad con los seres humanos: más allá de su ombligo: luchar: contra la barbarie: por una existencia menos absurda. La marcha de 150.000.000 es un ejemplo de ese trabajo. Frente a los cortitos intereses poéticos y humanos de nuestros poetas canónicos, Falcón elige hablar del mundo entero y de los cientos de millones de mujeres y hombres que, a diario ven arrasadas sus esperanzas de librarse de los fantasmas del hambre, de la explotación, de la enfermedad provocada, de la opresión, de la tortura. Hay que tomarse en serio lo que los poetas dicen: tiene que ver con el tipo de existencia humana que nos proponen.