en revista de crítica y creación poética Adarve, nº 7 (diciembre 2014)
(...) Su punto de partida es que “todo poema conlleva una postura de lenguaje y un determinado gesto en el mundo” (2007: 13) y que “la literatura no es una estructura inocente” (2010: 25), en el sentido de que siempre aporta una carga ideológica, aunque no sea inconsciente o se quiera esconder; bien reproducción de la dominante o bien construcción de una antagonista. Por eso, entiende que “el texto resulta ser una modalidad de acción, ya que se construye como espacio real del que se desatan unas determinadas conformaciones ideológicas y no otras” (2010: 26). Sólo siendo consciente de ello, se puede desarrollar una práctica poética realmente disidente.
La poesía de Enrique Falcón aúna el riesgo estético (por lo visceral de sus imágenes, su propia composición, su discurso no lineal, su original y perturbadora forma de enunciación) con el riesgo político (por su denuncia abierta, explícita y contundente). Pero también su obra arriesga por su ambición: La marcha de 150.000.000 (1994, 1998, 2009a) (su obra principal, que fue gestándose a lo largo de quince años de escritura y reescritura constantes, y contó con la edición de dos versiones parciales previas) es un único y descomunal poema, con una fuerte conciencia de unidad, formado por cinco mil versos distribuidos en cincuenta y cinco extensos cantos sin titular (de tres o cuatro páginas, pero que llegan a las seis fácilmente, o incluso a las diez), a modo de fragmentos agrupados en cinco grandes secciones. (...)
En
definitiva, Enrique Falcón desarrolla una poesía llena de contrastes
que reflejan la contradicción y la complejidad del mundo,
compuesta por distintos registros que evidencian una enunciación
colectiva. Así, encontramos verso y prosa (en las notas y los insertos),
versificación y listados, lirismo y crudeza, asco y belleza, muerte y
vida y sexo, desolación y esperanza, voces contrapuestas, términos
económicos e imágenes con una fuerza poética arrolladora, altura
metafórica y fragmentos de ensayos insertados, vulgarismos y
expresiones agramaticales populares y neologismos, lenguaje llano y
experimentación. Una gran riqueza lingüística que responde a una urgente
necesidad: transformar radicalmente la sociedad para garantizar la vida
y la dignidad de todos los seres humanos y de las otras
especies sintientes. (...)
Leerlo completo, aquí (págs 9-32).